Sí, amigos PulpoManíacos, lo he hecho... He comprado la figura de acción más grande que ha existido jamás. Estoy hablando del Balrog del Señor de los Anillos fabricado por Neca.
Últimamente, aparece mucho Neca por PasionPulp casi más que ninguna marca de juguetes y figuras, pero eso tiene una explicación. Fue McFarlane Toys quizás la que empezó un poco el negocio de vender figuras de mucha calidad pintadas a mano basadas en franquícias, sobretodo de películas, que los adultos coleccionistas siempre habían deseado tener: Evil Dead, Viernes 13, Alien, Terminator,... El creador de Spawn comenzó a tener más éxito con sus figuras que con sus cómics, y extendió su reino de plástico a los deportes yankis y a sus propias creaciones. La cosa es que las licencias de películas se fueron haciendo algo más caras y a McFarlane le apetecía dar preferencia a sus proyectos y diseños personales que a licencias muy conocidas. Y es ahí donde entra Neca, ya que si bien se hizo con algunas licencias de franquícias famosas, se dedicaba sobretodo a merchandising en plan Bobble Heads (sí, de esas estatuas cuyas cobezotas se menean de un lado para otro) o mochilas. Pero poco a poco fue creando figuras de gran calidad, hasta que hoy en día casi todas las películas importantes tienen sus personajes replicados en resina y plástico por Neca.
Una de esas franquícias es por supuesto, El Señor de los Anillos, que después de Star Wars, se ha convertido en una de las sagas cinematográficas más queridas y extendidas de todo el globo. Pero no sé si recordáis cuando estrenaron las películas hace unos años, que las figuras de acción que salieron al mercado eran producidas por Toy Biz, y la verdad es que no era una serie de mucha calidad que digamos. Además, había una gran pérdida, el gran demonio de sombra y fuego que despertó en las minas de Moria, el Balrog de Morgoth.
Pero hace un año, los artífices de Neca se dispusieron a cubrir esa falta, lanzando al mercado después de algunos años de elaboración, una figura del Balrog que estuvier a escala con los muñecos de Toy Biz. ¡A escala! Os recuerdo que las figuras del Señor de los Anillos tienen unas 6" (unos 20 cm) y el Balrog en la película tenía fácilmente unos 6 metros de altura. El resultado es una auténtica locura: una figura de unos de 20" de altura (más de 50 cm) y el doble de envergadura. Un monstruo en el sentido más literal de la palabra.
En una figura tan bestia (nunca mejor dicho) que hay lugar para el más ínfimo detalle. El cuerpo escamoso-rocoso de la criatura está plasmado a la perfección, con todas sus grietas de las que sale lava incasdencente. La cabeza es de lo mejorcito que yo he visto, ya que no cabe ninguna duda de que es una copia exacta del demonio que vimos en las salas. Además, con una escultura de tanta calidad, vemos detalles nuevos que son imposibles de ver en la película, por lo que es como si redescubrieramos esta preciosidad a la vez que nos damos cuenta del increible trabajo de diseño que había detrás de esta versión de Peter Jackson de esta criatura mitológica.
Sorprendentemente, el Balrog es una figura bastante articulada para el tamaño que tiene: el cuello, las alas, las muñecas, la cintura, los muslos, los tobillos y tres secciones de la cola cuentan con articulaciones de giro; mientras que los codos tienen articulaciones de clavija y los hombros de bola. Por supuesto, estas últimas articulaciones son las más útiles, ya que son las únicas que permiten una auténtica manipulación de la pose. Los demás puntos de articulación son meramente funcionales, aunque a veces ceden algo por el excesivo peso del bicho.
La pintura también es un aspecto a destacar en esta figura, ya que si bien no es perfecta porque se ven fallos a muy corta distancia, el resultado general es bastante placentero. Realmente da la sensación de que entre las ranuras se escapa la luz de algo caliente en su interior. El fuego de las crines y de las armas también está muy bien simulado. Eso, sí, la transición entre la zona inferior del cuello y la que está cerca de las llamas podía haber sido más gradual.
En cuanto a "special features", el Balrog no viene muy cargado pero trae unas cuantas cosas interesantes. Como aparece tanto en el libro de Tolkien como en el film, el demonio del mundo antiguo viene con dos armas de serie: la espada flamígera y el látigo incandescente de varias colas. Ambas están muy bien realizadas, pero tienen la pega de que no se pueden poner cada una en una mano, ya que la figura sólo tiene la mano derecha para esta función. La cabellera de fuego también se encinde con luces a la vez que suena un potente rugido al apretar un botón muy bien disimulado en la espalda. Sorprenderéis a vuestros amigos por la noche.
Pues hasta aquí todo (o casi todo) lo que tenía que decir de la figura de uno de los monstruos más icónicos del cine contemporáneo. Recuerdo cuando lo ví en la gran pantalla hace seis años y me quedé sin aliento. Desde ese momento sabía que tenía que haber uno en mi estantería, así que le doy gracias a Neca por cumplir ese sueño.
0 comentarios:
Publicar un comentario
Nota: sólo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.